Guía con una breve y rápida explicación sobre los cafés más conocido: ingredientes y explicación básica de cómo conseguirlos. Si te dedicas a las hostelerías y debes hacer café la tienes a un paso en tu móvil.
Conocido por sus propiedades estimulantes y su capacidad para combatir fatiga y cansancio, desde los orígenes de su consumo se han ido elaborando diferentes formas de preparaciones, existiendo hoy en día una amplia variedad de tipos de café que podemos tomar.
Cafés Solos espressos
Es el tipo de café más básicos se logra con la infusión del café con agua generalmente caliente que lleva a varios sistemas de extracción.
En lo que se basa todo es en poner en contacto con el grano de café molido con agua.
Dependiendo del sistema de extracción que se utilice, se obtienen distintos tipos de cafés.
Y os puedo asegurar que existen muchos tipos de cafés solos diferentes que vamos a conocer a continuación.
Cafés expreso ou espresso
Son cafés que puedes encantar nombrado de cualquiera de las tres maneras.
Un café expreso es aquel logrado con una maquina expreso haciendo pasar agua a unos 90 grados centígrados por un café molido muy fino, entre 7 y 9 gramos, durante unos 25 segundos en un máquina de café expreso que le aporta unos nueve bares de presión al café.
Resultado final es un café pequeño muy intenso compuesto por:
Crema
Esta es la capa café dorada en la parte superior del café, compuesta por proteínas, aceites, etc., que se crean por la combinación de azúcares y aminoácidos.
No todos los cafés producen crema, y es un tema de discusión: algunas personas la perciben amarga, mientras que otras consideran que es señal imprescindible para hablar de un buen espresso.
Para conseguirla muchos blends para expreso llevan en su composición robusta en distintas proporciones que facilita la aparición del la crema en el café.
Líquido
Esta es la parte principal del espresso, y aporta acidez y dulzura.
También se puede considerar como dos partes diferentes: el cuerpo y el corazón.
El cuerpo es la parte media del espresso, y es normalmente de color café caramelo.
En cuanto al corazón, la base del espresso, es generalmente un tono más rico, más oscuro del café.
No podemos despedirnos sin decir que es la base de una gran cantidad de cafés en los que forma parte fundamental de su formula.
Cafés expresos dobles
Tan simple como que se trata e un café que es la suma de dos expresos simples en una taza más grande.
Cafés Americanos expresos o cafes largos
La preparación del americano expreso o café largo se realiza con una máquina de café expreso , siendo en realidad un espresso diluido en agua caliente, en una proporción de 1/2 expreso y otro medio de agua caliente.
El resultado es una bebida menos concentrada y más suave al gusto.
El café americano es servido en una taza más grande que el expreso.
Se dice que nació para dar satisfacción a los americanos que en la segunda guerra mundial no sentían mucho apego por los pequeños y concentrados expresos italianos y querían algo más parecido a los cafés de filtro de su país.
Cafés expreso corto o Ristretto
Aunque se sirve en la misma taza que el espresso, te sorprenderá saber que su volumen se reduce a la mitad.
Si bien, la cantidad de café y el molido es idéntico al de un espresso, el tiempo de erogación del ristretto se reduce a la mitad, lo que ocasiona una extracción de sabores más concentrada, siendo más intenso para el paladar.
De igual manera, la cantidad de agua se reduce al 50% en comparación con el espresso, obteniendo una bebida más concentrada.
El ristretto (significa "limitado" o "restringido" en italiano) es ácido y con un cuerpo fuerte e intenso.
Esta bebida se obtiene a partir de 7-9 gramos de café molido en un tiempo entre 15 y 20 segundos dando una extracción de alrededor de 15 mililitros.
Todos estos cafés sin salir de la preparaciones de agua y café en máquina de expreso, comenzamos fuerte, ¿no?
Pero no son los únicos cafés sólo que puedes tomar.
Cafés de filtro
O cafés filtrados, vertidos o de goteo, igualmente conocidos como cafés americanos ya que tradicionalmente ha sido la forma de obtener el café en Estados Unidos y por que no decirlo en el Norte de Europa.
Las bases son las mismas para cualquiera de los sistemas de expiración que permiten extraer un café de filtro.
Se basan en verter agua caliente sobre el café molido, el agua pasa a través de las partículas de café molido normalmente con un grado de molienda medio.
En donde un filtro que suele ser de papel aunque puede ser de otro material como metal o tela. Su función es la mantener los posos fuera del café.
Café que de alguna manera una vez filtrado cae en un recipiente donde se recoge para ser servido.
La diferencia con los expresos es que en lugar de ser empujado a través de presión, el agua corre sola a través del café a causa de la gravedad.
Por esta razón, el proceso de preparación tarda un poco más para obtener un resultado diferente.
A diferencia del espresso, con su densidad y capas, un buen café de filtro es limpio, claro y consistente.
Esto se debe a que más agua absorbe los aceites y las fragancias del café en su propio tiempo y presión constantes, en vez de por la fuerza.
Además de una menor acidez, esto también te da una sensación en la boca más suave, al menos en comparación con el espresso.
Por lo tanto son cafés son más largos pero también más suaves.
Qué cafeteras utilizo para preparar los cafés de filtro.
Chemex y el Cono V60 de Hario son las cafeteras fetiche para los amantes de este tipo de café.
Aunque existe otras como la Clever Dripper, Kalita Wave que varían entre ellas en temas como la gama de materiales, el tamaño de los agujeros de goteo, la estructura del gotero, la forma de la cafetera y el tipo de filtro que utilizan.
El tiempo de preparación e infusión de un café de filtro hace que sea una taza de café por la que hay que esperar.
El proceso comienza humedeciendo las partículas y esperando que el café “florezca” durante por lo menos 30 segundos.
Esto permite liberar el dióxido de carbono y facilita un mejor flujo del agua durante el proceso mismo.
El resto del proceso, después de la floración, que es el vertido del agua para obtener café puede variar de una cafetera a otra, pero entre tres y cuatro minutos debería de poder conseguir un perfecto café de filtro en cualquiera de ellas.
Cafeteras de filtro eléctricas.
A diferencia de las anteriores la cafetera eléctrica funciona con conexión a la red Eléctrica.
Para preparar un café de filtro con esta cafetera no tienes más que añadir café molido medio, siempre recomendaremos moler en el momento de hacer el café, al filtro de la cafetera.
Rellenar del agua el deposito y poner a funcionar.
Tu intervención acaba aquí.
Eso sí recomendarte que si haces café en este tipo de cafetera no utilices el calentador de café que tiene en la parte inferior de la cafetera.
Recalienta el café y acaba quemándolo, mejor en el caso de que quieras conservar el café caliente un rato que te compres un buen termo, lo precaliente con agua caliente, y una vez eliminada el agua viertes el café en el termo.
Se mantendrá caliente unas horas.
Cafés de Prensa Francesa.
Es un café que se logra por inmersión del café en agua.
Prensa francesa es un tipo de cafetera de émbolo o de pistón con el que se puede obtener una excelente taza de café de forma fácil y rápida.
El sistema de prensa francesa para café tiene numerosas ventajas.
Se puede preparar una gran cantidad de café con rapidez, no necesita electricidad, se limpia fácilmente y no necesita mantenimiento. Es ideal para obtener un buen café, intenso y sabroso, sin complicarse la vida.
El café preparado con prensa francesa tiene mucho cuerpo y es un café más denso que el se obtiene por el sistema de filtrado, ya que retiene más aceites del café que otras cafeteras.
El sistema de filtro de la prensa francesa también es responsable de una textura un poco más arenosa de la infusión.
Para utilizar la cafetera usa un café tostado natural en grano y muelelo en el momento.
Las cafeteras de émbolo precisan de un café molido grueso tamaño de la sal marina gruesa.
Como no siempre podemos controlar el grado de molienda en los cafés ya preparados, lo mejor es hacerse con un molinillo y un paquete de café en grano, Sabora .
Para saber si la molienda es adecuada, podemos coger un pellizco de café con los dedos, si se desprende bien y no deja mancha es correcto. Si queda alguna mancha es que es demasiado fino.
El motivo de tener un café con molido grueso es que el agua debe tener superficie de contacto con el café para extraer todo los aromas y sabores.
Si es muy fino no hay casi superficie de contacto y solo obtenemos sabores amargos y desagradables, por eso no debes utilizar cafés molidos previamente que estarán pensados más para la cafetera Italiana probablemente.
Precalentar la jarra es fundamental para que no pierda temperatura demasiado rápido. Para ello, lo más fácil es llenarla de agua caliente y después vaciarla y listo.
El agua es tan importante como el café. Es mejor usar agua mineral o filtrada y debemos calentarla hasta los 92 o 93 ºC.
Para no estar pendientes con el termómetro, un buen método es hervir agua y dejarla reposar entre 15 y 30 segundos antes de añadirla al café.
¿Qué dosis de café hay que usar en esta cafetera?
Depende del gusto de cada uno, pero por norma general se usa proporción de 1 gramo de café por 15 mililitros de agua.
Si lo traducimos en tazas, para preparar 2 tazas de café hacen falta 210 mililitros de agua y 14 gramos de café.
Por supuesto, este ratio puede variar para obtener un café más o menos intenso.
Es una infusión, pero en este caso el café está molido grueso y se deja macerar un tiempo en agua caliente.
La infusión obtenida puede servirse por decantación o puede colarse haciéndola pasar a través de una manga.
Por lo tanto al igual que el anterior café es un café de inmersión por lo tanto se liza una molienda gruesa en su realización.
Existen diferencias de realización entre distintas zonas un mexicano utilizará canela y piloncillo, panela, en la olla.
Mientras que un gallego hará su café de pota (olla) sin estos elementos, y añadirá el azúcar en la taza junto probablemente con unas gotas de orujo.
Cafés Turcos
Pasamos de un extremo a otro en el grado de molienda, el café será molido hasta convertirlo en polvo similar en textura al azúcar glass.
El grado de molienda es más fino incluso que el que utilizamos en las cafeteras expreso.
Por otro lado necesitamos un Cezve que se pronuncia a algo simula a "iessve" que es la cafetera tradicional, en caso de no disponer de una siempre podéis echar mano de un cazo que tengas por casa.
Un buen café arábica de tostado natural en grano y molerlo justo antes de preparar el café a la turca es lo ideal.
Es fundamental moler bien ya que es importante que no haya posos grandes: pensad que el café turco no se filtra.
El türk kahvesi se toma en tazas pequeñas, que originalmente no tenían asa (hoy no es raro encontrarlas con ella) y que serían del tamaño de las de un café expreso italiano, o de las de un café solo que podríamos tomar en España.
Tienen el nombre de fincan. Si no tienen asa, se introducen en un dispositivo metálico llamado zarf.
Ponemos a hervir tantas tazas de agua como comensales vayamos a tener.
Para hacer un café a la turca:
Medid con una de las tazas que vayáis a usar. Usaremos el mismo cezve.
Si vais a usar azúcar, la pondremos ahora. No podemos poner azúcar al finalizar. Pensad en cómo de dulce os gusta.
Ponemos la cafetera al fuego y removemos hasta que se disuelva.
El café con azúcar es habitualmente llamado “café de mujer”, y sin azúcar, “café de hombre”, no me preguntes por qué.
Echamos el café: entre una y dos cucharaditas (de café) por taza dependiendo de lo cargado que te guste.
El café deberá estar recién molido.
Cuando hierva por primera vez, retiramos el cezve del fuego, y repartimos la espuma en las tazas de la manera más uniforme posible. Volvemos a poner al fuego.
Cuando hierva por segunda vez, bajamos el fuego al mínimo, y mantenemos el café por un par de minutos más.
Cuando vayamos a servirlo, echamos una o dos cucharadas de agua fría para que los posos se vayan al fondo, y servimos el café sin filtrar.
Lo acompañaremos de un vaso de agua fría (hay quien se la toma antes, y hay quien se la toma después para mantener la boca limpia tras el café).
No apures el café hasta el fondo de la taza advertido quedas.
Si tenéis delicias turcas (lokum), usadlas para acompañar este café.
El molido del café será una molienda fina, tipo arena de playa, no tan fino como para un expreso pero más fino que para un café de filtro.
Desenroscas la parte superior de la cafetera y sacar el portafiltro.
Rellenar la base de la cafetera con agua caliente de la máxima pureza hasta la válvula.
Agregar el café molido fino en el portafiltro y nivelas el café sin apretar, es importante esto si compactas el café probablemente no pueda subir el agua por el portafiltro.
Colocar el portafiltro en la base y enroscar la parte superior de la cafetera en la base.
Poner la cafetera a fuego medio que si tiene llama no debe de sobrepasar el laterales.
Dejar que el café suba hasta el final.
Como ves más que de café solo podemos hablar de cafés solos, y esto no es más que el principio.
Aeropress
La Aerobie Aeropress es una cafetera englobada dentro de la categoría de cafeteras de émbolo, pero realmente supone un paso adelante en el uso de este tipo de tecnología para preparar café.
El agua y el café se mezclan durante diez segundos. A continuación, la presión de aire empuja la mezcla a través de un micro-filtro en 20 segundos.
El tiempo de preparación total del café es realmente corto obteniéndose un café muy suave.
cafeteras de vacio o sifón
Diseño espectacular. Para los que tengan tiempo para preñar un café aromático y sabroso.
¿Funcionamiento de las cafeteras de sifón?
Una cafetera de vacío funciona exactamente como un sifón: el calentamiento y el enfriamiento del recipiente inferior cambia la presión de vapor del agua en el inferior, empujando primero el agua hacia arriba en el recipiente superior, y luego permitiendo que el agua caiga de nuevo en el recipiente inferior. Listo, rápido y sencillo.
Características de estas cafeteras de vacio:
Diseño muy llamativo con dos recipientes, uno encima del otro y un pequeño elemento que filtra el café.
El café tarda en prepararse
Fabricadas normalmente en cristal de borosilicato
La cafetera debe normalmente desmontarse para verter el café
Pueden tener o no fuente de calor (quemador de gas o alcohol)
Muchas se pueden calentar en el fuego de la cocina o vitrocerámica
Hay cafeteras desde 3 tazas hasta 8-10 tazas.
Los cafés con leche.
La gran mayoría tienen como base el expreso al menos en los más conocidos. A continuación, se añaden diferentes cantidades de leche calentada con vapor o de espuma de leche.
El café con leche en españa
En España si pides un café con leche lo más probable es que te pongas un café al cincuenta por ciento leche y otro tanto de café expreso.
El café latte es el hermano mayor del capuchino, donde todo gira en torno a la espuma suave y sedosa.
Normalmente, el café latte se prepara con una o dos dosis de expreso (1/3 de la bebida) y 2/3 de leche calentada con vapor, con una pequeña capa (alrededor de 1 cm) de espuma de leche.
La textura de un café latte es muy importante, ya que aporta esa bella apariencia a la bebida.
Como ves ligeramente diferente del café con leche español en cuanto a las proporciones.
Que son entonces los cafés capuchinos
Un capuchino contiene expreso y espuma de leche a partes iguales.
El tamaño de la taza es muy importante para conseguir el equilibrio perfecto entre el sabor del expreso y la cantidad exacta de leche.
El capuchino es una bebida preparada con café expreso y leche montada con vapor para crear la crema. Un capuchino se compone de 125 ml de leche y 25 ml de café expreso.
Los italianos agregan cacao en polvo según gusto personal, pero luego los americanos modificaron esta costumbre por agregar canela en polvo, visto que la canela es muy popular en postres americanos, sin embargo el capuchino original no lleva canela.
Se distingue del café con leche español en que la leche que se utiliza se espuma menos que el capuchino, y jamás se le añade cacao o canela.
Flat White
El Flat White es un café nacido en Australia como reacción al capuchino y a la presencia tan importante de la espuma de leche en el café.
Aunque no exento de polémica para la mayoría de los baristas un Flat White original se prepara en una taza de unos 150 ml con dos shots de espresso y una capa fina de leche ligeramente emulsionada (crema).
El resultado es una bebida sedosa con un intenso sabor a café y con menos presencia del sabor a leche.
¿Dónde está la polémica entonces?
Resulta que algunos australianos prefieren su Flat White con una sola carga de espresso.
Por otra parte, determinados baristas son partidarios de prepararlo con un doble ristretto y otros dicen que el ristretto amarga el sabor final
No confundir con el macchiato o cortado en español del que hablaremos más adelante.
Para empezar la diferenca es un latte macchiato y un caffè latte es el orden en el que se vierte el café en la taza o el vaso.
Con el latte macchiato, primero calientas la leche al vapor y luego añades el expreso a la leche.
Con el caffè latte, añades la leche al café.
El otro elemento transcendental es la cantidad de café en relación con la leche que lleva, ya que en el latte macchiato se utiliza medio tiro de expreso que se añade a la leche, es decir una lágrima de café.
Realmente es leche manchada con un poco de café.
Cafés cortados y/o Macchiato.
En cada cafetería lo preparan con unos pequeños detalles u otros y hay quien lo prefiere más largo o corto de de leche.
Pero su definición “profesional” por así decirlo, seria una base expreso a la que añadimos una nube de leche vaporizada, calentada con ese vapor de las cafeteras expreso, que le aporta cremosidad y cierto dulzor.
Y entendido así es exactamente lo mismo.
Sólo que el cortado español en ciertas zonas va un paso más allá con la leche y en algunos casos llega incluso al 50% de leche y 50% de café expreso que lo alejaría del macchiato italiano y lo acerca a ser un café con leche pequeñito.
Yo la verdad lo entiendo más como un macchiato que es la idea de cortar o manchar el café con unas gotas de leche.
Eso si siempre se sirve en una taza de menor tamaño que el café con leche
Espresso con panna
Esta bebida es también otra versión del cortado.
Se realiza sobre un espresso normal o doble, al que se le añade crema batida. Si te gusta probar nuevas variedades no dejes de pedirlo en los países anglosajones donde se le conoce como Expreso with Panna.
Cafés bombón
En un vaso de cristal transparente vierte la leche condensada al gusto, normalmente suele ser la misma cantidad de leche condensada que de café.
Prepara un café expreso.
Echa el café sobre la leche condensada, la diferencia de densidades hará que el café no se mezcle con la leche condensada y se mantengan los dos colores separados.
El café bombón tiene un alto aporte calórico y, debido a la leche condensada, su sabor es muy dulce. Se recomienda no añadir azúcar.
Una variable del café bombón es el café tres colores, que consiste en añadir en la parte superior una capa de espuma de leche y finalizar con un toque de canela o cacao en polvo.
Café Vienés
El café Vienés es un combinado delicioso de leche, azúcar y nata montada, o más bien semimontada, si queremos ser más correctos en la elaboración de este café.
Un café expreso
Nata semimontada
Cacao en polvo o chocolate rayado.
Prepararemos un café expreso doble, añade azúcar y remuévelo hasta que el azúcar quede disuelto.
Monta nata fresca con un toque de azúcar. La nata debe añadirse semimontada.
Echa el café en una taza de cristal.
Con la ayuda de una cuchara desliza la nata semimontada por encima del café son suavidad, para que no se mezclen nata y café antes de ser consumido.
Espolvorea chocolate o cacao en polvo, o si te apetece con virutas de chocolate.
Si te decides por esta última opción, las virutas de chocolate, cuidado con echar muchas, pesan y se hundirían en la nata.
Puedes completar tu café Vienés con Vainilla o canela sobre la nata montada al gusto de la persona que lo va a tomar.
Café Breve
El café Breve es una forma de preparar el café de origen americano, es la variación estadounidense para el café con leche.
Esta receta lleva café, crema chantilly y leche pasada por la lanza de vapor.
Para elaborar un café breve partiremos de tres partes iguales de café, crema chantilly y leche.
Cafés con Chocolate
Los cafés moca o mocaccinos
Suele llevar un tercio de expreso y dos tercios de leche, pero se añade una parte de chocolate, normalmente en forma de jarabe de chocolate, aunque algunos baristas usan chocolate en polvo instantáneo.
Los mocas contienen chocolate negro o con leche.
Una variante es el café moca blanco, hecho con chocolate blanco en lugar de negro o con leche.
Existen también variantes en las que se mezclan los dos jarabes, mezcla que se conoce con distintos nombres y que incluye “moca blanco y negro”, “moca moreno” y “cebra”, en otras partes del mundo.
El café moca es una variante del café con leche de origen estadounidense.
Los cafés marocchino
Se hace colocando un trocito de chocolate negro o de leche en una taza de café.
Se vierte el expreso sobre el chocolate para derretirlo, se le agrega cacao en polvo y se le añade un poco de espuma de leche.
Se puede decorar con más cacao en polvo y azúcar morena o incluso un par de granos de café.
Es de origen italiano más concretamente de la zona de Turín.
Algunos cafés con alcohol
Cafés Carajillos
El carajillo es típico de España y entendemos que es café acompañado por licor, lo más tradicional es acompañarlo de brandy.
Suele tomarse después de comer o durante la sobremesa.
Lo primero de todo es hacer café con cualquiera de las cafeteras que tengamos en casa.
Una vez tenemos listo el café, servimos un café corto en un vaso de cristal.
A continuación, añadimos el licor que más nos guste, así como la cantidad podrá variar según si gusta más o menos cargado, es decir, que tenga más sabor a licor o este pase más desapercibido.
Algunos de los licores más usados para hacer carajillo además del brandy o coñac son el whisky, anís, aguardiente u orujo, ron, licor de hierbas, etc.
También se puede añadir azúcar a gusto del consumidor.
Tradicionalmente se preparaba quemando el brandy junto con granos de café y corteza de limón.
Esta mezcla se añadía después al café ya fuera con todos los ingredientes o colado.
Café Irlandés
Una mezcla de café caliente y whisky coronado por nata o crema de leche.
Optativo y al gusto pizca de canela molida, cacao en polvo, o bien un par de granos de café.
Vertemos el whisky irlandés que hemos calentado mezclado con el azúcar, que llegara a un tercio de la copa aproximadamente si estamos utilizando la copa y las medidas correctas.
El café bien cargado que hemos preparado lo vertemos en la copa, lo que ocupará unos dos tercios de la copa.
Y con mucho cuidado y sobre una cucharilla dada la vuelta vertemos la nata que previamente hemos levantado, con la intención de que la nata y el café no se mezclen.
Si te gusta la canela o el cacao puedes espolvorear una pizca e estos elemento en la parte superior del café, o decorar con un par de granos de café.
En 4 vasos previamente calentados, poner dos cucharadas de azúcar y el whisky (1 copiña por vaso ).
Verter el café muy caliente y revolver.
Colocar encima el helado de vainilla.
Si queréis conocer otras forma de preparadlos podéis leer el post: Café Escocés: tres formas de prepararlo.
Cafés Asiáticos
El café asiatico es una mezcla de café, leche condensada, brandy y Licor 43, con un toque de canela y corteza de limón.
Sirve leche condensada cubriendo las facetas que hay en la parte inferior de la copa, de ahí la importancia de tener la copa original, pues te da la medida justa de la leche condensada a utilizar, y no sólo de la leche como veremos.
Añade coñac hasta cubrir la línea de puntos de la copa, otra medida que nos da la copa en sí.
Un poco de Licor 43 hasta la parte superior de las lanzas de la copa.
Añades café expreso hasta casi la parte superior de la copa.
La receta tradicional utiliza el café expreso.
Terminas con un poco de canela y, opcionalmente, una corteza de limón y un par de granos de café.
Cafés Caribeños
Es una bebida de café caliente con ron y nata montada.
Para hacer un café caribeño:
Prepara un espresso doble.
Combina Tía María o cualquier Ron Caribeño, azúcar moreno o sirope en un cazo pequeño.
Añade el café y mezcla bien al calor.
Sirve en taza de capuchino de 150 ml.
Coronar con nata montada.
Otra opción muy espectacular
Pon el azúcar en una taza y el ron en otro recipiente.
Enciende el ron y échalo al azúcar.
Girar bien.
Añade un espresso doble sin apagar las llamas.
Cuando se hayan apagado las llamas, echa la nata.
Cafés fríos
Cafés con hielo
La primera norma es utilizar un café bien concentrado.
Si es posible utiliza uno o dos tiros de café expreso.
Si no mejor la cafetera italiana con un café con cuerpo y no mucha agua para obtener un café denso.
No utilices nunca café filtrado te saldrá un café aguado en exceso.
Por otra parte utiliza hielos formados a partir de un café bien concentrado.
Es una forma fantástica de reutilizar esa media cafetera que no has tomado en casa en verano.
Si añades el hielo sin más te va aguar en exceso el café.
El vaso grande es un mal aliado del café con hielo porque hace perder superficie de contacto entre el café y el hielo, de modo que el café se enfría con mayor lentitud y a la vez recibe demasiada agua del hielo.
Cuando menos denso sea el café, mayor será el cubito de hielo, para evitar que se deshaga del todo.
Pero nunca grandes piedras.
Si vas utilizar azúcar disuelve primero en el café caliente, si se lo echas una vez ha enfriado el café se disolverá mucho peor.
Cafés frappé
“Frappé” es un término francés que significa agitado o helado. Aunque el origen del café es griego.
En verano nos gusta pedir café con hielo, pero otra opción quizá más sibarita es el café frappé, café con hielo cubierto de espuma.
Su origen reside en Grecia, donde se inventó en la década de los 50, por casualidad.
Un trabajador de la feria de comercio de Tesalónica no encontraba agua caliente para prepararse un café y usó una coctelera para hacerse un café con agua fría.
Es un café, con leche y hielo, bien agitado. Aunque admite que se le añada nata, siropes, etc.
La creatividad de cada establecimiento entra en juego. Si quieres aprender ha hacer un buen frappe pincha el enlace
Cafés ‘Cold brew’
Y si sois muy fans del café seguramente ya habéis descubierto que en los últimos tiempos abundan, en las cafeterías de especialidad, los llamados “cold brews”.
Se trata de una preparación de café en frío o temperatura ambiente de larga maceración durante de 6 a 24 horas, dependiendo de la intensidad deseada y de la temperatura del agua.
Se puede hacer de muchas maneras existen cafetera que lo consiguen gota a gota, pero también se pueden conseguir por procesos de inmersión.
Una magnificas opciones para combatir el calor con todo el aroma y sabor del café.
Affogato
El café Affogato (ahogado, en español) es un postre italiano que combina dos elementos históricos de la cultura italiana: el café espresso y el helado.
Una receta muy fácil de preparar ya que solo vas a necesitar tres ingredientes.
1 bola de helado al gusto. Aunque, el sabor tradicional para preparar el café Affogato es con el helado de vainilla, ya que al no ser un sabor tan fuerte deja el protagonismo al café; pero puedes ir probando con otras variaciones de sabores como por ejemplo el ron con pasas, chocolate negro, chocolate blanco, etc, que combinen con el amargo y aromático gusto del café.
Solo ten en cuenta que los sabores frutales muy ácidos y los helados estilo sorbete no entran dentro de la ecuación de un buen Affogato.
Realización:
Una taza de café expresso doble.
Un chorrito de licor al gusto, de preferencia Amaretto, Baileys o cualquier otros licor cremosos de frutas o de frutos secos como los licores de avellanas o almendras.
Incluso va bien con otras variedades de bebidas alcohólicas, como el aguardiente el orujo.
Una copa de helado o taza con capacidad de unos 300 ml previamente enfriada en el congelador.
Con nuestro helado seleccionado, tradicionalmente se utiliza el helado de vainilla, tomamos una porción de helado y la colocamos en nuestra copa previamente sacada del refrigerador.
Cubrimos al momento con el café bien caliente. La cantidad de este va al gusto.
Por ultimo, añadimos si nos apetece un chorrito de licor.
Sirve inmediatamente, revolviendo el helado de vainilla en el café caliente para que se derrita un poco.
No están todo los cafés que son pero si son todos los cafés que están.
Si no está aquel café que a ti te vuelve loco déjanoslo en el comentarios te lo agradeceremos enormemente.
Un saludo, que la vida te sonría y que nunca te falte un gran café.